Luis García Montero es uno de mis poetas de cabecera, siempre he admirado el uso que hace de la palabra, como la transforma en poesía, abriendo nuevas ventanas al mundo. Ahora puedo también añadir que el poeta granadino ocupa un lugar en la narrativa que me gusta. Con «No me cuentes tu vida», segunda novela que leo de García Montero, he descubierto que la poesía no es un género encasillado, si no que podemos encontrarla, como un turista despistado, en otros modelos de literatura, como la novela.
«No me cuentes tu vida» (típica frase que los jóvenes dicen a sus mayores para que no les den lecciones), es la historia de una familia, contada por el padre, donde al contrario que en el título, sí que se nos cuenta una vida, bueno no, muchas vidas, con el fin de que su hijo entienda que su recorrido, el de su madre, el de sus abuelos, es también su propia historia. Un intento de acercamiento generacional, un esfuerzo paternal por acercar posturas y épocas, un acto de amor.
Desde principios del siglo XX, pasando por la Guerra Civil, el exilio, la Transición y la época actual con la crisis económica, el 15 M y los indignados, Luis García Montero da una visión personal e intimista de un mundo y un país que repite historias aunque con diferentes protagonistas.
Aquí os dejo unos fragmentos del libro que he resaltado:
El mundo es absurdo y está lleno de contradicciones, pero a la hora de valorar el carácter de las personas, la meteduras de pata y la significación de los hechos, no podemos olvidarnos de su novela, de su argumento. (pág 156)
Los hijos siempre han sido así, han sido esto, el motivo más rotundo para que nos tomemos en serio la realidad, para que no nos acomodemos a la mentiras y al rutina de una existencia confusa. (pág 235)
Los poemas sirven, -resumía Juan- para hacernos comprender que la vida es una conversación, una calle repleta de bares y de gente, un lugar en el que el nosotros es inseparable del yo y el yo se convierte en mentira cuando se distancia de nosotros». (pág 253)
En medio de tanto baile, de tanta fecha, de tanto salto, lo único imprescindible es saber en cada momento quién puede donarte un riñón. Es verdad, no conviene olvidarlo, no te separes de tu familia. (pág. 458)
Si os interesa la obra de Luis García Montero, hace unos meses hice una reseña de otro libro suyo, «Alguien dice tu nombre», lo podéis ver AQUÍ. Si os interesa el libro, pensáis en adquirirlo o queréis ver su precio hacer CLICK en la imagen.
Hasta el próximo post!